El presidente Barack Obama pronunciará
esta noche ante una sesión conjunta de ambas cámaras del Congreso, como ya es tradición todos los años, el discurso sobre el estado de la Unión.
Se espera que el presidente centre sus principales palabras en el tema sobre el que se enfocó la campaña que le dio el triunfo en las elecciones y un segundo mandato en la Casa Blanca: la economía y la creación de empleos.
El discurso dará la oportunidad de Obama de esbozar cuáles son sus planes en éste, su primero de otros cuatro al frente del país, y cómo piensa encarar los desafíos económicos que la nación tiene por delante, sin dejar de invertir en dos frentes que considera cruciales, infraestructura y educación.
De acuerdo con Obama, EE.UU, no sólo necesita reducir sus más de $16 billones de dólares de déficit sino que requiere de fondos para echara a nadar proyectos que creen empleos y fortalezcan la clase media.
Aunque el presidente abordará la necesidad de reducir el abultado déficit fiscal de EE.UU. resaltará la necesidad de hacerlo mediante una combinación de recortes en los gastos con aumentos tributarios, específicamente a los estadounidenses más adinerados.
Según el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney, “el énfasis mayor que (el presidente) hace en estos grandes discursos sigue y seguirá siendo el mismo: la necesidad de hacer que la economía funcione para la clase media”.
Otros de los temas que Obama ha puesto de relieve al comienzo de su segundo mandato son la necesidad de llevar a feliz término una reforma integral de las leyes de inmigración, establecer un control más estricto sobre las armas de fuego, y encarar con mayor seriedad el cambio climático. Todos estos temas seguramente serán tocados nuevamente, pero desde una perspectiva económica.
Asesores del presidente han dicho que igualmente abordará las disputas presupuestarias que aún mantienen divididos a demócratas y republicanos, incluida la falta de consenso entre los dos partidos que haría entrar en vigor el 1ro. de marzo recortes de $85 mil millones de dólares a programas gubernamentales.
Este año la Casa Blanca ha implementado para la ocasión una campaña simultánea en las redes sociales de respaldo a las campañas del presidente, lo que pone de manifiesto la decisión de Obama y sus asesores de buscar apoyo público para destrabar las estancadas negociaciones partidistas en el Congreso.
En su primer discurso sobre el Estado de la Unión en 2009, pocas semanas después de haber tomado posesión de su primer mandato, Obama se enfocó principalmente en la urgencia que tenía el país de salir de la crisis económica y en cambiar el rumbo a las políticas seguidas durante los ocho años previos por el presidente George W. Bush.
Un año después, en 2010, urgió al Congreso a plasmar en una ley su propuesta de reforma de atención a la salud, y en 2011 buscó reanimar a su partido del revés sufrido en las elecciones legislativas de medio término cuando los demócratas perdieron a manos de los republicanos la mayoría en la Cámara de Representantes.
El discurso del año pasado fue primordialmente de corte electoral, en el que el presidente buscó poner de relieve ante los ojos de la nación cuáles iban a ser sus principales batallas políticas a corto y mediano plazos.
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